Nuestra institución lleva la denominación honorífica de Sant Pacià, en memoria de este gran obispo de Barcelona, pastor de esta Iglesia en la segunda mitad del siglo IV y uno de los Padres de la Iglesia latina, autor de diversos tratados teológicos, que constituye un referente relevante en la historia eclesiástica de Catalunya.
Una frase que se encuentra en una de sus cartas ha sido escogida como lema del Ateneu Sant Pacià: «quaecumque lingua a Deo inspirata» (no hay lengua que Dios no inspire), ni lenguaje que no lo exprese y conduzca a Aquel que es fuente de Belleza y de Bien y que sostiene el mundo y cada persona humana.